sábado 18 mayo 2024
28 abril, 2024
(Fabián Robles/28 de abril 2024) En un hecho sin precedentes, tras casi cuatro años de litigio, los periodistas Edgardo Cabrera Morales y José Luis Ahuatzin, apoyados por el abogado Francisco Mixcóatl Antonio, ganaron una demanda por supuesto daño moral al exmagistrado local Mario Antonio de Jesús Jiménez Martínez.
En conferencia de prensa, la defensa de ambos comunicadores dio a conocer la sentencia del amparo directo civil 113/2023, dictada por el Segundo Tribunal Colegiado de Circuito del Vigésimo Octavo Circuito, relativo a la labor periodística en Tlaxcala, libertad de expresión, transparencia, rendición de cuentas, derecho al honor, el decoro, la honra, la reputación y la privacidad de los servidores sujetos al escrutinio público por los actos de relevancia que realizan.
En septiembre de 2020, el entonces magistrado demandó por la vía civil a ambos comunicadores, a quienes exigió el pago de 200 mil pesos por reparación de un supuesto daño moral que le causó una nota informativa y una columna de opinión publicadas el 9 y 10 de enero de ese año.
La información referida -basada en un audio obtenido por los periodistas- versó sobre un probable reparto discrecional de 10 millones de pesos, derivado de una devolución de impuestos que hizo el Servicio de Administración Tributaria (SAT) al Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), entonces presidido por Jiménez Martínez.
Ahora, el Segundo Tribunal Colegiado de Circuito del Vigésimo Octavo Circuito, determinó que ambos periodistas no incurrieron en ningún acto que dañara el honor, decoro, honra, reputación y privacidad del entonces magistrado.
Mixcóatl Antonio -expresidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH)- desveló que, durante el prolongado litigio, salieron a relucir diversas anomalías y probables actos de contubernio para favorecer al ahora exmagistrado.
Por ejemplo, refirió que ese fue el caso de la jueza que conoció de este asunto quien, sin apego a la ley y en medio de diversas irregularidades, condenó a los dos comunicadores a reparar económicamente el supuesto daño moral y a publicar una disculpa en el medio de comunicación en el que se difundió la información.
En su momento, los dos periodistas dieron a conocer una serie de anomalías registradas durante el proceso, entre las cuales figura una sospechosa celeridad con la que se turnó la demanda del exmagistrado, por lo que interpusieron ante el Consejo de la Judicatura del TSJE una queja en contra del juez Lázaro Castillo García.
El abogado de los comunicadores destacó la sentencia de este caso, al considerar que sienta un precedente en el estado de Tlaxcala en defensa de la libertad de expresión y del derecho a la información.